…Aprendí mucho con él, el trato con las personas , a relacionarme, y es que a él le quería todo el mundo, por lo desprendido que era y esa alegría , aquellos chistes; – Venga, Simón que te veo con hambre- aquellos años, las anchoas, las rabas, las sardinas, los sobaos…

De nuevo me vuelven a
llamar desde mi querida Santoña  y de
nuevo se me ha vuelto a encoger el corazón. Sebastián Fernández, mi querido
Sebas, se ha marchado con la espuma azul del oleaje de esa hermosa bahía. Era,
es, hermano de Curri, la de las BBB, la que fuera, y será siempre,  una segunda madre para mi.

El mes pasado el
Ayuntamiento Santoñés tuvo a bien reconocer – como sus mejores embajadores- a
los más de diez mil alumnos internos , repartidos por toda la geografía nacional,  que cursamos estudios en el Patronato Militar
Virgen del Puerto y que hoy nos encontramos
unidos en  una asociación que
canaliza y guarda las vivencias y sentimientos de cada uno de nosotros. Al bar
de las BBB , situado en la esquina de la calle trasera del Patronato, acudíamos
los internos a por golosinas, primero, a por tabaco, luego y a tomar café y
copita , después, según la edad que nos correspondía en aquellos hermosos años,
tan azules, como el mar, esa bahía, recuerdos. Por eso, BBB es también
merecedor de ese reconocimiento al espíritu embajador santoñés con que nos ha
reconocido el Ayuntamiento.

Lo cierto es que yo llegué a  Santoña , para cursar todo el bachillerato, un
tres de octubre de 1970, con diez añitos y me marché un 18 de mayo de 1978.
Pronto, muy pronto, conocí a mi segunda familia, los de las BBB, primero el
abuelo, con el que me iba a la huerta y al monte, y es que a mí siempre me han
gustado las cosas del campo; la abuela Carmina, que me metía los yogures en el
bolsillo, qué buenos estaban, los de fresa,
y en aquellos años, que se lo comía uno todo ; Julita, que me hacía
cestas de patatas fritas, detallazo, en donde metía los huevos fritos, para
untar; ahora anda un poco malita, un besazo. Pablo Echave padre, el maestro, qué
decir de él  cuando tantas y tantas
generaciones de santoñeses/as han pasado por su escuela; muchos, muchos sábados
, Pablo, hablaba con nuestro Coronel para que yo pasara con él días enteros ;
me llevó a conocer todos los rincones de Santander , me hablaba del románico,
de los montes , del mar , de la iglesia de Santa María , de las tradiciones ..;
parte de lo que soy se lo debo a él, ya que absorbía todo lo que me contaba, me
llenaba de palabras, cultura. De su esposa Curri, qué decir, mi madre, la llevaré
siempre en mi corazón, todo lo que diga de ella es poco, sobran las palabras,
me quería una barbaridad. Su hija Mari Car , un poco más pequeña que yo, con la
que compartí también muchos momentos;  el
oleaje del mar también se la llevó; y ahora me llama Pablito, mi querido Pablo,
su hermano, para comentarme que su tío
Sebas también se ha ido, el uno de julio,  caminando por la bahía, en silencio.

Sebas,
probablemente el más desconocido para muchos internos del Patronato, era el
hermano de Curri, entonces llevaba las cosas del butano y Curri, muchas veces
le decía  – llévate al niño a repartir –
, eran sábados,  el niño era yo y lo que
repartíamos eran las bombonas de butano por los pueblos cercanos. Fumaba tabaco
caro y  bueno : Winston, rubio. Le gustaba
el Licor 43 y con tantas  paraditas que
hacíamos ni qué decir tiene volví más de una vez mareado porque se pensaba que
yo tenía más edad, las cosas de Sebas. Aprendí mucho con él, el trato con las
personas , a relacionarme, y es que a él le quería todo el mundo, por lo
desprendido que era y esa alegría , aquellos chistes; – Venga, Simón que te veo
con hambre- aquellos años, las anchoas, las rabas, las sardinas, los sobaos; y
lo bien que nos trataban en los bares de los pueblos, no le dejaban nunca pagar,
en las paraditas, entre reparto de bombona y bombona. Últimamente , muy de vez
en cuando, cuando se tomaba los vinos con los profesores José María Fiz y Jesús
Machado, me llamaba, para eso, se acordaba de mí, y yo de él.  Mis versos , desde Cáceres, los de siempre :

En Santoña comencé a sentir,

en Santoña comencé a soñar,

En Santoña , con Sebas ,

repartí y pude ver
por primera vez el mar.

Que descanses en paz , buena persona. Sebas, el del las
BBB.

 

Matías Simón Villares.

Desde Cáceres

Antiguo Alumno del Patronato Militar Virgen de Puerto 1970-1978. Santoña. Santander